sábado, 28 de marzo de 2015

Dromtömpa: Alabanza a Dipamkara.


Dromtömpa: Alabanza a Dipamkara.
Dipankara Stotra.

Esta alabanza que consta de treinta slokas[1], está dirigida al gran Jo-wo, el único dios de Tibet. Om Svasti.

1.      Yo ruego a los pies de Dipamkara-Sri,  quien nació
En la noble familia de los reyes conquistadores de Bengala,
Poseedores de los tres[2], perfectos y completos,
En la misma línea a la que perteneció Santijiva[3].

2.      Yo ruego a los pies de Dipamkara-Sri, quien fue insuperable
En el servicio a sus padres, fue modesto, hermoso y encantador,
Quien poseía sabiduría y compasión, tenía un corazón humilde y tierno,
Y también era experto y tenía una gran fuerza mental.

3.      Yo ruego a los pies de Dipamkara-Sri,
Quien fue un maestro de los diversos temas mundanos,
Tales como las artes y la medicina,
Y también de todas las ramas del conocimiento.

4.      Yo ruego a los pies de Dipamkara-Sri,
Quien no era atraído por el deseo,
Y quien renunciando a su derecho al reino,
Fue ordenado como monje por los Mahasangika.

5.      Yo ruego a los pies de Sri Atisha, el puro,
Quien estaba bien versado en la enseñanza del Tathagata
Tal como está explicada en la cuarta parte del Vinaya-pitaka[4],
Y que estaba por encima de toda falta.

6.      Yo ruego a los pies de Sri Atisha,
Quien bajo la guía de muchos gurús y eruditos,
Dominó los tres Pitakas[5], la gramática, lógica, y todas las instrucciones[6],
Y quien tenía un vasto conocimiento.

7.      Yo ruego a los pies de Sri Atisha, quien recibiendo
El néctar de la bodhicitta[7] del gurú de Suvarnadvipa[8],
Quien también era de ascendencia real,
Trabajó para el bienestar de todos los seres.

8.      Yo ruego a los pies de Sri Atisha, el único padre,
Quien con su amor sincero hacia el necesitado y sufriente,
Ganó la gratitud de todo este samsara[9],
Sean dioses, semidioses[10], o seres humanos.

9.      Yo ruego a tus pies, a quien por su clara comprensión
Y concentrada meditación en los dichos
De los maestros con  poderes sobrenaturales[11] y de la deidad tutelar[12],
Consiguió los poderes sobrenaturales, y el poder de predecir el futuro.

10.  Yo ruego a tus pies, a ti que siendo objeto
De veneración y amor, a pesar de venir a los Himalayas
Para beneficio de los practicantes en Tibet,
Seguiste siendo el gurú de los grandes hombres de tu país y raza.

11.  Aunque el Budismo pudo existir en Tibet incluso sin la llegada
De un gran erudito como tú, sin embargo mucha gente
Estaba equivocada con respecto a su significado profundo,
Y tu les diste la enseñanza correcta;  a tus pies ruego.

12.  Yo ruego a sus pies, a quien por medio de la traducción de los Shastras,
De la corrección de las traducciones anteriores, comentándolos,
Y componiéndolos, llevó a los discípulos por el Sendero correcto,
Y ayudó al florecimiento del Dharma.

13.  Con su gran conocimiento refutó la ideas equivocadas de los Tirthikas[13],
Y llevó de vuelta al sendero hacia la liberación a aquellos
Que alababan y seguían el mal sendero de Mara[14] y Mahadeva[15];
A los pies de ese guía excelente de aquellos que buscan la liberación, yo ofrezco mi ruego.

14.  Yo ruego a su pies, a quien por practicar repetidamente
A través del ciclo de renacimientos las Seis Perfecciones:
Generosidad, moralidad, paciencia, esfuerzo, concentración, y sabiduría,
Alcanzó la perfección de los dos propósitos de la vida[16].

15.  Yo ruego a tus pies, a ti que lograste las cuatro formas de reunir seguidores:
Cumpliendo los requerimientos de otros de acuerdo a sus necesidades,
Usando palabras amables, trabajando para su interés de acuerdo a los preceptos,
Y consiguiendo los fines de otros por medio de la fuerza de uno mismo.

16.  Yo ruego a tus pies, a ti que eres una mina de virtudes,
Y eres rico en las siete riquezas:
La riqueza de la fe, la moralidad, la escucha,
La generosidad, la inteligencia, el comportamiento, y la vergüenza.

17.  Yo ruego a tus pies, a ti que posees el Conocimiento Superior del Ojo Divino:
Cuando el buen discípulo Dromtömpa, unido a ti por su devoción en las vidas pasadas,
Estaba yendo a ti y ,aún a una gran distancia,
Tu dijiste: “El upasaka[17] va a volver hoy

18.  Yo ruego a tus pies, a ti que posees Conocimiento Superior del Oído Divino:
Cuando un discípulo devoto te rogaba
Tocando un címbalo en Magadha, tu le dijiste a Drom,
Que tú oías el sonido, incluso desde Tibet.

19.  Yo ruego a tus pies, a ti que posees el Conocimiento Superior del Poder:
Mientras estabas en Lhasa, al oír un címbalo celestial tocado por los dioses,
Tú subiste al cielo, te postraste ante los dioses,
Les rogaste, y los circunvalaste en el cielo.

20.  Yo ruego a tus pies, ¡Oh Maestro de corazón amable!
Por cuya amabilidad fue recobrado el testamento real oculto[18] en el tesoro;
La dakini abrió su puerta para ti,
Y tú obtuviste el permiso de Sakyamuni para verlo.

21.  Yo ruego a tus pies, a ti que eres el eterno salvador de la vida,
Y afamado como un segundo Nagarjuna, puesto que los medios
Para salvar las vidas de las personas que sufrían de lepra,
Fueron introducidos por ti, y sanaron con ellos.

22.  Yo ruego a los pies del maestro de los dioses, sobre quien,
Mientras estaba sentado en la arena de O, en Nethan,
Indra y los demás dioses derramaron
Las cinco joyas desde el cielo, como si fueran flores.

23.  Yo ruego a tus pies, a ti quien tras oír que la joven de Yorpo Chinru
Encontró la muerte[19] por haber ofrecido los adornos de su cabeza,
Realizó para ella los últimos ritos, y dijo que la hija de buena familia
Renacería en el cielo; y así ofreciste liderato a todos los seres.

24.  Yo ruego a sus pies, a quien predijo el futuro y dijo:
“Desde aquí, me dirigiré al Cielo de Tushita;
En el Cielo de Tushita me encontraré con aquellos
Que tendrán reverencia y amor hacia mí”.

25.  Yo ruego a los pies de quien es honrado en todas partes:
En Tushita por el nombre de Vimala Akasha[20];
En el País de los Nobles[21], por el nombre de Dipamkara[22],
Y en este País del Himalaya, por el nombre de Srimat Atisha[23].

26.  Yo ruego a tus pies, tú que nos bendijiste directamente
Mostrándonos lo que no es visible, desde el Cielo de Tushita,
Cuando yo, Dromtön, construí el Monasterio de Rwa-sgren,
E imploré tus bendiciones para todos los seres.

27.  Desde el cielo tu miras con ojos misericordiosos a aquellos,
Que percibiendo tu grandeza, te ruegan con una mente clara,
Y de una manera inequívoca; yo te ruego
Que bendigas a aquellos que son devotos tuyos.

28.  En este País del Himalaya hay muchos que te siguen
Con una reverencia aún más grande de la que yo pude tener.
No obstante, por favor, permanece como mi gurú
Con la misma amabilidad que la madre tiene hacia su hijo.

29.  Estando ciegos, los hombres en esta edad de degeneración[24],
Siguen como amigos espirituales a aquellos que realmente no lo son,
Y por tanto fracasan en el liberarse de esta prisión del samsara;
Amablemente sácalos pronto con el anzuelo de tu compasión.

30.  ¡Oh, tu, Gran Ser! Por favor, sigue en todas partes y por siempre
Como mi gurú. Dame amablemente el primer sermón
Para el logro de la Insuperable, Completa, y Perfecta Iluminación.
Así te ruega Dromtömpa.



Traducido al castellano y anotado por el ignorante y falto de devoción upasaka Losang Gyatso. Editado a 26-03-2015.





[1] Estrofas de cuatro versos.
[2] Gracia, gloria y riqueza.
[3] Shantarakshita.
[4] La Cesta o Canon de la Disciplina, que trata de la disciplina de los monjes y monjas.
[5] Las Tres Cestas o Cánones que componen el conjunto del Canon Budista: son el Canon del Vinaya, el Canon de los Sutras, y el Canon del Abhidharma.
[6] Upadesa, las instrucciones de grandes maestros con respecto a las diversas enseñanzas del Buda.
[7] La Mente de la Iluminación.
[8] El Maestro de Sumatra, de trata de Dharmakirti de Sumatra, a quien Atisha fue en busca de instrucción, y con quien permaneció durante doce años. Atisha lo consideraba su gurú raíz, a peras de haberse entrenado bajo ciento cincuenta maestros. De él recibió las enseñanzas de Adiestramiento Mental (Lojong).
[9] La existencia cíclica.
[10] Asuras.
[11] Siddhis.
[12] Yidam.
[13] Seguidores de escuelas no budistas.
[14] El Maligno o demonio. Hay cuatro demonios: el Mara de las aflicciones, el Mara de los agregados, el Mara que es Yama, el Señor de la Muerte; y el Mara Hijo de los Dioses (Devaputras), que son demonios que habitan en el sexto cielo del Reino del Deseo.
[15] El Gran Dios, se refiere a los seguidores de un dios personal, eterno, creador, y omnipotente.
[16] Realizar las dos acumulaciones de mérito y sabiduría.
[17] Practicante laico.
[18] Se trata del testamento del rey tibetano Stong Tsang Gampo, que de acuerdo a la tradición fue encontrado por Dipamkara en un pilar del templo de Lhasa.
[19] Debido a haber sido reprendida.
[20] Espacio Inmaculado.
[21] India.
[22] El que Porta la Lámpara.
[23] Paz (Atisha), Dueño de Toda Opulencia.
[24] Kali-yuga